Seguramente todos hemos oído hablar alguna vez del efecto mariposa, ese pequeño cambio que puede generar en consecuencia un cambio enorme. A pesar de ser un concepto complejo, para muchas personas es una filosofía e incluso se puede aplicar a muchos campos de la vida.
Para empezar, el “efecto mariposa” recibe este nombre a partir de la idea del meteorólogo Edward Loren, quien plantea la idea de que, dadas unas condiciones iniciales de un determinado sistema, la más mínima variación en ellas puede provocar que el sistema evolucione en formas completamente diferentes. Observó que pequeñas diferencias en los datos de partida, algo aparentemente tan simple como utilizar 3 ó 6 decimales, llevaban a grandes diferencias en las predicciones del modelo. De tal forma que cualquier pequeña perturbación, o error, en las condiciones iniciales del sistema puede tener una gran influencia sobre el resultado final. Es decir, cambios minúsculos que conducen a resultados totalmente divergentes.
El efecto mariposa podemos aplicarlo a tantos aspectos de la vida
Ejemplo a lo grande:
Nuestros efectos mariposa:
¡BUEN TRABAJO! Espero que os haya gustado.